Tu huella, tu estigma, tu marca, tu señal
se halla en tus ojos, en tu mirar...
Me miras y me regalas tu odio;
me enseñas el camino que nunca pensé ver:
Tristeza que llega a lo más hondo
de mi castigado ser.
Tus ojos idolatro, los amo tanto...
A pesar de los pesares...
A pesar de lo que pasa ahora...
A pesar de lo que pasara antes.
El sabor de tus labios es mi sueño
aunque sólo los probara un momento,
pero de ellos sólo salen puñales
que clavas en mi enamorada alma.
Mas no me afectan tus males.
Mi amor no cambiará nada.
Tus labios idolatro, los amo tanto...
A pesar de los pesares...
A pesar de lo que pasa ahora...
A pesar de lo que pasara antes.
Tu cara, hermosura que me enloquece.
Abatido, mi corazón, padece
una terrible enfermedad,
que ya no puede tener cura alguna,
que para mi resulta mortal:
Cruel, penosa y dura.
Tu cara idolatro, la amo tanto...
A pesar de los pesares...
A pesar de lo que pasa ahora...
A pesar de lo que pasara antes.
Tus ojos, tus labios, tu cara, tú...
Me das vida y muerte, libertad y esclavitud.
Tú eres la causa de mi existencia.
Soy y no soy por ser tú mi razón,
pero tengo grandes dosis de paciencia
porque sé que al final seré tu amor.
Te adoro, para mi lo eres todo,
Te quiero, te idolatro, te amo tanto...
A pesar de los pesares...
A pesar de lo que pasa ahora...
A pesar de lo que pasara antes.
Mª Carmen Serrano